Buscando algo diferente [Rose]

Era muy tarde, quizá más de lo que estaría permitido en cualquier lugar, pero a la rosa poco le importó aquello, se había decido a disfrutar Antigua tal y como eran los festejos, de día y de noche. Quizá también era algo de curiosidad por saber qué era lo que la gente decía a un día después de aquel fatídico accidente en la carrera. Al pensar en ello, Rose se mordió los rosados labios pero se decidió a no dejar que nada le molestase ni por error. Llevaba su rostro escondido tras una capucha oscura que cubría un vestido bastante sencillo de color turquesa con detalles en color marfil con unas pequeñas flores rosadas en la falda, algo más adecuado a las calles que a un baile.

Caminaba con paso seguro, solamente llevaba con ella una dama de compañía y un caballero como escolta, lo más selecto de su grupo conformado por decenas de personas había sido reducido a una comitiva de solo tres. Antigua era un lugar que te sorprendía a cada paso, y eso era lo que la rosa estaba experimentando, música, colores, artesanías, todo parecía cobrar vida a la luz de la luna primaveral. Una sonrisa apareció en sus labios en cuanto alguien se le acercó ofreciendole ir a un teatro privado por el módico precio de una moneda de cobre. Confiada, Rose pagó aquella cantidad y dejó que le dirigiesen hasta el lugar, era bastante fácil a decir verdad, pero el lugar al entrar se mostraba íntimo y familiar, a primera instancia aquel recibimiento le había gustado.

Se sentó en una de las últimas sillas en el lugar, pero aún así tenía una buena vista, las velas alumbraban todo dandole un aire de misticismo a todo, le habían dicho que era un espectáculo para asombrarse, donde el futuro sería predicho y las sombras del pasado hablarían en el presente. Obviamente que todo aquello la rosa no lo había creído, era demasiado incrédula para aquel tipo de cosas, pero por una moneda de cobre estaba dispuesta a averiguar qué tipo de cosas pasaban bajo las penumbras de su ciudad favorita. Cruzó las manos sobre su regazo, musitando suavemente. -Espero que no tarden demasiado.- quizá para ella pero fue lo suficientemente audible para las personas cercanas, pues un ligero asentimiento fue lo que recibió de alguien más. alguien que seguramente no habría reconocido la voz de la rosa del Dominio, y nada era mejor que eso.

Había algo en aquel lugar que tenía a la rosa un tanto en vilo por saber de qué trataba todo aquello, la música que se tocaba era queda, añadiéndole ese aire al lugar de ser algo muy privado. La gente seguía yendo y viniendo entre el escenario y los lugares, asegurándose de que todo estuviese perfecto para el 3er llamado a escena, no faltaba nada y aquello podía percibirlo la rosa claramente. No fue hasta que alguien le habló que se percató de que había sido escuchada anteriormente, era claro su descuido. -Algo así, quiero ver de que trata todo.- contestó con una ligera sonrisa, deshaciéndose un poco de la capucha que le cubría el rostro, dejando por fin ver sus bien cuidadas facciones.

Luego de haber contestado aquello, prestó por primera vez atención al público, que era significativamente reducido, se mordió los labios un tanto pensativa por si aquello era lo que de verdad le convenía, ¿Y si era una pantalla para robarles? Seguramente tenía que ser muy cuidadosa, de eso estaba segura. -Mejor, es más privado y personal.- comentó, pues para ella era cierto, mientras fueran menos, los actores tendrían que concentrarse en hacerlo bien para ellos, obviamente, sin saber nunca que dos nobles se encontraban entre sus filas. -¿Arryn? ¿Y qué hace una Arryn lejos de su nido?.- preguntó con algo de diversión, siendo amable, sincera incluso. -Soy Rose, Rose Tyrell.- se presentó mordiendose los labios antes de continuar. -Pero shhh... hoy no es mi día de ser representante oficial de mi casa.- confió por lo bajo, ahora si, solo audible para ellas dos.

La sonrisa de la Arryn era amable, parecía sincera así que la rosa correspondió con una propia ante aquel detalle, encogiéndose de hombros al entender perfectamente a qué era lo que se refería, era algo normal para ella intentar conocer lo más posible aquellos lugares en donde estaba. -Antigua es una gran ciudad, ya te darás cuenta.- contestó con confianza, de todos los lugares en los que la rosa había estado, aquel era su favorito, por lo que no tenía reparo alguno en recomendar aquella ciudad. -Te lo agradezco.- comentó con una verdadera sonrisa de complicidad en los labios, viendo como las luces parecían menguar de nuevo para comenzar.

La obra dio inicio, se trataba de un espectáculo donde predecían el futuro, la rosa observaba con atención cada uno de los detalles que ahí se presentaban y como era que los enlazaban para decirle al público lo que sucedería después, tenía una mirada sorprendida cuando volvió a ver a Lyanna, era algo difícil de explicar para ella. -Pues digamos que... Antigua no es solo mercados, bailes y puertos, quería ver que había detrás de las sombras de ésta ciudad.- contestó con seguridad, recomponiendo sus facciones aún algo sorprendidas por lo que le decían en aquel lugar, podía reconocer algunos de los elementos de la brujería que sus amigas habían dicho que se llevaba a cabo en muchos lugares, eso le interesaba. -¿Qué acaba de decir?.- le preguntó a la Arryn mordiendose los labios al no haber escuchado bien la profecía que la "bruja" le había deparado a la dama noble que estaba en escena.