Harrald Greyjoy (En proceso)

Nombre del personaje

Preparad las espadas, hombres del Hierro. Porque pronto el mundo nos pertenecerá a nosotros, los hombres mas duros de la tierra

Datos Básicos

Nombre completo:Harrald Greyjoy.
Apodos: El Kraken de Hierro.
Edad: 44
Lugar de Nacimiento:Pyke.
Clase Social:Lord Greyjoy, Señor de las Islas del Hierro.
Ocupación:Gobierna las Islas del Hierro con mano firme, esperando su momento para caer sobre Poniente
Orientación Sexual: Heterosexual
Armas: Ballesta y espada larga

Descripción Psicológica

Descripción Psicológica: Como señor de las Islas, hace honor a su titulo. La vista de la sangre no solo no le desagrada, sino que hasta le da hambre de mas. Torturador, ansioso de batalla y de muerte. Disfruta viendo la cara de sufrimiento de la gente a la que derrota. A veces, alimenta su esperanza de salir con vida de sus salas de tortura siendo algo amable con ellos, para luego empuñar el mismo la espada que los partirá en dos. Sus rostros en esos momentos son indescriptiblemente placenteros. Se alimenta del miedo en el rostro de la gente. Sus hijos son su mas profunda fuente de decepción. Aunque tienen partes que le agradan, odia ver aspectos en ellos que no son suyos. Sabe que su hija, aunque intenta hacerse pasar por un hombre del hierro, y que de hecho, a ojos de los demás, lo consigue, para Harrald no es mas que un teatro de una chiquilla. En cuanto a su hijo, Su libertinaje le decepciona profundamente, aunque sea un luchador nato como lo ha sido siempre su padre. Sabe que por sus debilidades, su hijo será asesinado o peor, que cuando el gobierne traerá la ruina a las islas. Solo se siente conforme a sus expectativas en cuanto a su hermano, salvo por la parte amable que hay en el para con su hija, pero bueno, es una mujer después de todo, no se le puede pedir a todo el mundo ser como el Señor de las Islas del Hierro.

Habilidades de Combate:
Estrategia (Naval), Combate Cuerpo a Cuerpo (Espada larga) y Combate a Distancia (Ballesta)

Virtudes:

Liderazgo:

Su ansia de sangre, el participar siempre el primero en las batallas y ser el ultimo en reclamar botin le han hecho popular entre sus hombres, que son todas las tropas de las Islas del Hierro. Jamás le pide a uno de sus hombres algo que el no pudiera hacer el mismo, y que de hecho, a veces hace de buen grado. Ya sea torturar, saquear o ejecutar a alguien. Pelea para vencer, pero también para salvar a sus hombres y devolverles la gloria de la batalla y la conquista. Eso le hace ser temido en Poniente y respetado en las Islas.

Combatiente:

Ha nacido para librar sus propias batallas, y lleva cerca de 30 años haciéndolo. Cualquier desaire merece una paliza, y su susceptibilidad le hace creer que hay muchos desaires en su presencia. Pocos son los hombres cercanos a Harrald que no hayan intercambiado puñetazos con su señor. Misteriosamente, esas peleas le han hecho ser aún ams querido por sus hombres, pues les demuestra siempre que están al mismo nivel.

Rey del Mar:

En su barco, con su flota, es invencible. Nadie puede vencer al Kraken de Hierro mientras capitanea sus huestes de barcoluengos. Experto estratega naval, lo único a lo que de verdad ha dedicado tiempo a parte de luchar.


Defectos:

Sanguinario: Un enemigo que intenta matarte merece morir. Si estás dispuesto a quitar una vida, debes estar dispuesto a perder la tuya, por eso no hay prisioneras en una batalla en la que Harrald Greyjoy haya participado.

Exigente:

Al ser el primero en entrar en combate, exige lo mismo a sus hombres. La cobardía, la reticencia o la huida de la batalla están penadas con la muerte por tortura a manos del señor Greyjoy. Sus hijos tampoco escapan a su ley.

Sucio:

El honor no tiene significado para él. Si ha de hacer alguna canallada para vencer, la hará sin pestañear. Solo importa una cosa. Ganar.

Gustos:

La fuerza, la Habilidad y la Inteligencia. Cosas que intenta potenciar en sus hombres, en sus hijos y en el mismo.

Disgustos:

La debilidad y la cobardía.

Manías,Fobias u Enfermedades:

Sadismo.

Datos Biográficos

Familiares:

-Bjorn. Hermano. Vivo.

-Axel. Sobrino. Vivo.

-Keira. Hija. Viva.

-Anthon. Hijo. Vivo.

Historia:

Harald Greyjoy siempre fue, ya desde pequeño, un hombre del Hierro modélico. A los doce años su padre le encontró violando a una de las criadas de palacio. Su vida fueron los combates y los barcos. Desarrollando poca afición fuera de ahí. Mato a su primer hombre a los catorce. Y cerca de los veinte se convirtió en el señor de las Islas del Hierro.

Las batallas se sucedían. No podían oponerse a los dragones, estaba claro, así que poco a poco, fue aumentando su flota, reforzandola con mas y mas hombres. Siempre fue perezoso para responder a las llamadas de los Targaryen, y cada vez ha ido a peor. Sobre todo desde que el dragón que se sienta en el Trono de Hierro es mas joven que él. Desembarco del Rey está muy lejos y el sonido del mar colapsa cualquier llamada del continente a los hombres de las Islas.

No puede decirse que haya sentido amor alguna vez. pero si alguna vez sintió algo parecido fue con la mujer que se casó. Su esposa era una mujer fuerte y brava. Siempre que estaban en la cama parecía mas una pelea que un acto de amor, y rara era la vez que no acababan ambos con heridas tras tales actos carnales.

Cuando murió por una enfermedad, Si Harrald había sido siempre duro y frío como la roca, entonces se convirtió en puro metal, afilado e intocable. Rara vez sus hijos pudieron arrancarle una sonrisa de los labios.

Ahora, a sus cuarenta y cuatro años. Viendo lo que está pasando en Poniente con los Targaryen y los Altos Bastardos, Harrald mira expectante como los dragones y los demás van a matarse entre sí. Puede que se decante por un bando, si le ofrece lo suficiente por su ayuda, aunque el hambre del Kraken es grande, pero también lo es su fuerza. Y quien controla los Mares, controla el mundo. Sobre todo ahora que ya no hay dragones que sobrevuelen el cielo.


Otros:

En las Islas corren los susurros de que Harrald reclamará su corona algún día, cuando esté preparado.

Harrald cree que debe ser él quien gobierne en las Islas como rey para lanzar a sus huestes a la conquista.

Tiene varios bastardos desperdigados por el mundo. Ninguno ha llegado a las Islas, pero si lo hiciera y fuese un digno heredero, ¿quien sabe si no lo nombraría como tal?