Personajes Cannon: Greyjoy [5/6] *

Te usurpará todo, el oro, el corazón, el alma, la vida, por el precio del Hierro. Todo por el Hierro. Así es Harrald Greyjoy, un hombre, un pirata, violador y asesino. Lejos se encuentra el honor de su nombre, no busca condecoraciones, ni tampoco eternas promesas. El Lord de Pyke vive su vida a su manera, sirviendo a sus hermanos del Hierro justo como ellos le sirven a él. El agravio pasará por la espada, la deslealtad se pagará con la muerte. Temido y odiado por muchos, Harrald se ha convertido en aquella sombra lejana que todo Poniente podría temer. Una vez sus barcos desplieguen sus velas, el horror de la piratería caerá sobre víctimas inocentes. Toma lo que quiere, porque está en su derecho, porque es la única forma de demostrar quiénes son los Kraken, aquellos que viven al margen de toda vida del continente. El Hierro es su hogar, el aroma a mar salada, el sonido de las olas romper contra los acantilados, es lo único que necesita para mantenerse vivo. Arranca todo lo que veas conveniente, hazte con todo lo que desees, roba todo aquello que no te pertenezca. No busques nada noble en Harrald Greyjoy, pues lo único que recibirás entonces serán malas decepciones. El Hierro no obedece, el mundo obedece al Hierro, el mundo se somete a las Islas de mareas embravecidas.

El hermano menor de Harrald es el almirante encargado de dirigir la flota del Hierro. Se trata de un hombre serio, criado por y únicamente para servir a su hermano mayor, a quien respeta y admira, en todo lo que a éste se le antoje. Nunca pestañea, jamás da un paso en falso, ni, mucho menos, se echa atrás en sus decisiones. Todo aquello que sus deseos anhelan termina por caer en sus manos, mostrando así ser un hombre que no cede hasta conseguir sus objetivos fijados. Bjorn es un hombre respetado por todos sus marineros, aclamado por los hombres y deseado por las mujeres, las cuales aún no han conseguido hacerse con su corazón de hierro. Tan sólo a una mujer amó, sólo a la madre de su hijo. Amante del mar, del olor a libertad, del golpeteo de la brisa en su rostro. Si realmente lo desease, podría conseguir alzar a todo el pueblo del Hierro contra su propio hermano, pues presenta toda aquella carisma de la cual Harrald carece. Más no lo hace. Nunca ha deseado la posición de su hermano y prefiere mil veces hacerse cargo de la flota que el hecho de dirigir las Islas. Es así, de todos modos, el hombre que mayor poder amasa en sus tierras después de Harrald. Presenta una muy buena relación con su sobrina Keira, teniendo en mente que sea ésta la heredera de la flota cuando él no de más de sí. Situándose siempre al margen, dispuesto tan solo a seguir órdenes, el apasionado y salvaje corazón que late bajo su pecho es la prueba exacta de lo entregado que está a la causa del Hierro. Todo por el Precio del Hierro.